Cuando iniciamos un proyecto o un negocio, lo iniciamos con emoción y alegría o muchas ilusiones sobre lo que podrá venir. Pero es mejor no dejarnos llevar por las emociones ya que podemos cometer errores que nos pueden costar mucho.
Una de las características de los emprendedores al iniciar un negocio es la confianza que se tiene en lo que se está haciendo. Si vemos que las cosas no van como las hemos planeado, esa confianza puede disminuir, pero lo importante es tener objetivos firmes y saber que paso a paso se irá construyendo el éxito de nuestra empresa.
El tiempo para considerar el éxito de un negocio se ha establecido entre tres y cinco años. Durante el camino se nos presentarán retos así como oportunidades y debemos estar atentos para identificar ambas.
Aquí te presentamos los cinco errores más comunes que cometen los emprendedores.
- No elegir bien a nuestros socios
Muchas veces pensamos que asociarnos con familiares o amigos puede ser una buena idea y dejamos de lado que se trata de un negocio.
Es muy importante elegir a las personas con las que nos asociamos, así como elaborar un acta constitutiva para determinar las obligaciones y los derechos de quienes participan en la empresa.
2. No desarrollar adecuadamente un plan de negocios
Un plan de negocios es un documento escrito sobre un negocio que se planea o uno que se pondrá en marcha. En el describimos el propósito general de la empresa así cualquier detalle de relevancia en nuestro proyecto como un estudio comercial, técnico, financiero, organizativo así como aspectos relacionados con la comercialización, el precio y el modelo de negocios.
Según ProMéxico (el organismo del Gobierno Federal encargado de coordinar las estrategias dirigidas al fortalecimiento de la participación de México en la economía internacional) el plan de negocios tiene dos puntos importantes a tomar en cuenta:
- Definir y enfocar el objetivo haciendo uso de información y análisis adecuados
- El Plan de Negocios puede ser usado como una herramienta de venta para enfrentar importantes relaciones, incluidas aquellas con sus prestamistas, inversionistas y bancos.
3. No delegar
Al inicio es posible que nosotros debamos hacer diferentes tareas, pero una cosa es cierta: no podemos hacer todo. Es importante delegar responsabilidades en otros para podernos enfocar en otros aspectos de nuestro negocio.
4. No capacitarse e informarse
Con una formación de carácter empresarial reduciremos la posibilidad de fracaso en el negocio.
También es importante es conseguir toda la información necesaria para lo que pueda beneficiar a nuestro negocio (apoyos financieros, créditos, gestores, recursos gubernamentales, etc.)
5. No elaborar un plan de marketing
Nuestro producto o servicio necesita ser conocido por todos. Para eso, un plan de marketing es esencial en el desarrollo de una estrategia de éxito para buscar oportunidades para vender así como llegar de un modo más eficaz a nuestros clientes.
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